DE VIAJE POR ESPAÑA (X)

 

VALLADOLID

Sábado 19 de agosto.

Poco después de las 10, dejamos León y nos dirigimos con rumbo a Valladolid, lo que nos llevará hora y media. La carretera es de doble sentido, atraviesa pequeñas poblaciones, y el pavimento está en regular estado. Hacia mitad del camino paro el coche en el arcén, pues desde hace días, quieren fotografiarse en un campo de girasoles, y encontramos uno enorme con los girasoles abiertos y espléndidos. Seguimos nuestra ruta y llegamos al destino a las 12:00. Vamos a estar alojados 3 noches en casa de Sara; la idea era estar 2, pero hemos dejado una en León para tener una más aquí.

Llegados a Valladolid, e instalados en el piso, decidimos poner rumbo al pequeño pueblo de Fuensaldaña, población situada a unos 7 km, y donde Mari nos prometió llevarnos a comer el rico lechazo que preparan en alguna de "las cuevas" del pueblo. Pasamos junto al bonito castillo medieval, y nos dirigimos a LA NIETA, el restaurante que se encuentra en una de las antiguas Cuevas donde se guardaba el vino. A las 13:00 entrábamos al lugar directos a probar el sabroso manjar. La cueva está excavada en la tierra que ha sido horadada para que la temperatura no varíe y se mantenga el vino sin cambios. No teníamos reserva, y el llegar temprano nos ha permitido disponer de la única mesa para 6 que quedaba libre. Nos ha atendido una mujer agradable a la que le hemos comentado lo que queríamos: unos aperitivos (torreznos, chorizos y boletus), ensalada, y 2 cuartos de lechazo. Todo estaba rico, pero el lechazo estaba exquisito. También los postres caseros y la jarra de clarete de la zona.

Vuelta a Valladolid, y siesta, para esta tarde visitar el centro. La idea era salir sobre las 7 a hacer la visita, pero hay una ola de calor que hace que a esa hora la temperatura fuera de 36 grados. Así que hemos aguantado hasta las 8:30 que la temperatura ha bajado un poco, y buscando la sombra hemos recorrido el espacio hasta la Plaza Mayor y las calles peatonales que la rodean. Mari y Lola querían recordar los lugares que conocían de cuando ambas eran niñas, y Mari de los tiempos en los que ya casada, vivió aquí: calle San Lorenzo, el parque del Poniente, la trasera de la plaza Mayor donde sus abuelos tenían la tienda de muebles.......

Después de la abundante comida en Fuensaldaña, no había mucho apetito; total que nos sentamos en una terraza a tomar unas tapas, y para casa.

Cerca de las 11 estábamos de vuelta. Carlos y yo nos quedamos viendo el partido de baloncesto de la selección española contra la República Dominicana, y ellas a dormir.

Domingo 20 de agosto. VALLADOLID

Tras el desayuno, comenzamos la visita turística de la ciudad. El primer destino era la Catedral de Valladolid. Después de visitar en días pasados las catedrales de Burgos, León, Segovia, Ávila y Astorga; la catedral de Valladolid decepciona por tratarse de la ciudad más importante de Castilla y León, y haber sido capital de España. Construida para sustituir la colegiata gótica de Santa María (de la que quedan bellos restos en la parte posterior, se construye un templo herreriano que nunca llegó a terminarse. No discuto el posible valor arquitectónico, pero, estéticamente, no tiene nada que ver con sus hermanas de las demás provincias. En resumen: no me gusta.

Otra cosa son otros templos, palacios y espacios de la ciudad, especialmente el convento de SAN PABLO y el colegio de SAN GREGORIO. El primero ofrece una espléndida fachada gótico isabelina plena de bellas imágenes. También del mismo estilo es la fachada del colegio San Gregorio, obra de GIL de Siloé, e igual de espléndida.

San Gregorio acoge en su interior la maravillosa colección del Museo Nacional de Escultura, en el que están representados los más destacados maestros de la imaginería española. Además, San Gregorio cuenta con un precioso patio y una bella escalera. Próximo a San Pablo, se encuentra el Palacio de los Pimentel, donde nació el rey Felipe II. Cerca de la catedral, se encuentra otro buen ejemplo del románico de la ciudad, se trata de la iglesia Santa María de la Antigua con una esbelta torre cuadrada del mismo estilo.

En un restaurante cercano, hemos dado cuenta de una buena comida. Luego vuelta a la plaza pasando por la calle donde hace 68 años Lola y Mari se fotografiaron juntas. Se han vuelto a poner para repetir la fotografía.

En un cafeteria de la plaza Mayor hemos parado a tomar café.

De interés: ! la selección femenina de España ha ganado el Mundial de fútbol !

Lunes 21 de agosto. VALLADOLID

El programa de hoy nos llevaba a aprovechar la mañana en las cercanas ciudades de Simancas y Tordesillas, ambas con destinos concretos. Luego volver a Valladolid antes de la hora de comer para terminar con las visitas que quedaban pendientes.

SIMANCAS está a unos 15' de Valladolid, y allí nos dirigimos a las 9:30 para visitar el conocido Archivo Histórico. Antes de ir al edificio que lo contiene, dimos un breve paseo por la población para terminar desayunando en el bar que hay frente al Archivo.

A continuación fuimos a hacer la visita de este edificio histórico con reconocimiento de la UNESCO por su contenido. El edificio es un castillo edificado en el siglo XVI por Juan de Herrera (el arquitecto de El Escorial) por encargo de Felipe II; en él se guardan los más importantes documentos del Reino desde los tiempos de los Reyes Católicos. La visita permite ver distintos documentos originales en vitrinas de seguridad, donde también encuentras pequeñas arcas reales donde ellos guardaban dichos documentos.

A continuación nos dirigimos a la villa de TORDESILLAS para visitar los palacios donde se se fraguaron el Tratado  de Tordesillas en el que los Reyes de Castilla y de Portugal acordaron el reparto de los territorios de los nuevos descubrimientos. Cerca de estos se encuentra la iglesia de San Antolín, y un poco más allá el Convento de Santa Clara. En este, las monjas producen excelentes dulces, que sirven a través de un torno. Compramos 4 cajas de ricos dulces para llevar a Málaga. Terminada la visita volvimos a Valladolid.

Después fuimos a comer a un restaurante gallego que había cerca de la casa. Al terminar, nos fuimos a casa, pues hacía un calor insoportable (cerca de 40 grados); a las 8 de la tarde decidimos salir a dar una vuelta para visitar el Campo Grande, un extenso parque que hay en pleno centro de la ciudad, junto a la Academia de Caballeria y el Paseo de Zorrilla. Por último pasamos por un supermercado para comprar algunos productos típicos para llevarlos a Málaga.

 

Pedro J. Tiscar