24 febrero 2017

¡TODOS AL SUELO!

Hoy, como alguna otra mañana, me he levantado de la cama sin saber con exactitud el día en el que me encontraba. Quehaceres diversos me han tenido ocupada hasta pasado el mediodía y al escuchar las noticias de las dos a través de la radio, me he enterado de que estaba viviendo el 23 de febrero, una fecha difícil de olvidar para las personas de mi generación.
Durante largas horas de zozobra, vivimos la desagradable experiencia de aquella asonada militar más propia de una república bananera que de la democracia que con tanta ilusión, inquietud y sobresaltos habíamos visto poco a poco desarrollarse hasta llegar a aquel fatídico 23 de febrero de 1981, que pudo haber segado de raíz las libertades apenas conquistadas y apenas disfrutadas.
De aquellos momentos tensos y difíciles, recuerdo muy especialmente la indignación que sentía entonces contra los políticos, que reunidos en el Congreso, no se ponían de acuerdo en nombrar un nuevo presidente del Gobierno después de que los adversarios -y aún mucho peor, los correligionarios- le hicieran tomar la decisión de dimitir al entonces presidente Adolfo Suárez. Como en las circunstancias trascendentes se conoce a las personas, aquella fue sin duda la mejor prueba para demostrar su valor, su dignidad personal y la del cargo que todavía representaba. En ese peligroso examen obtuvo, sin duda, un extraordinario cum laude.
Desde entonces, la música militar me provoca desazón y va unida en la memoria al temor y al desconcierto de aquel 23 de febrero de ingrato recuerdo. En la distancia, los acontecimientos ocurridos pierden la virulencia de la inmediatez, pero nunca se olvidan.
Y ahora me irrito, ¡otra vez!, cuándo escucho a los políticos de nuevo cuño -alguno de ellos aún no nacidos en aquella fecha- pontificar con total ligereza sobre los errores de la transición y la
conveniencia de desmantelar todo aquello que no les gusta y que ignoran cuánto costó conseguir. Y aunque, por supuesto, no deseo que vuelva nunca a repetirse, me gustaría ver sus caras y su reacción ante el mandato chulesco de ¡todos al suelo¡
MAYTE TUDEA.
23-febrero-2017



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Por favor: Se ruega no utilizar palabras soeces ni insultos ni blasfemias, así todo irá sobre ruedas.
Reservado el derecho de admisión para comentarios.

Buscar