Soy la perfecta tontuna,
soy de esa absurda clase
de mujeres que han nacido
esperando ya casarse.
Cuando conocen a un hombre
al que pretenden pescar,
tienen normas aprendidas
y que saben manejar.
Primero hacerse la tonta
que es lo que él desea,
una boba bien vestida
es lo que mas le marea.
Si la cosa se ve clara
y es seguro que le gustas,
presentarlo a la familia
despacio si no se asusta.
"Es por ti querido Pepe
para cuidarte mejor,
no resisto por más tiempo
que vivas en la pensión".
Y cuando el cura nos diga
aquello de: "Para siempre".
Mi cara dulce de niña
será otra de repente.
-Lo conseguí, lo he trincado
este idiota ya ha picado,
por tanto a partir de ahora
y como manda mi menda,
este muchacho tan tonto
será mi esclavo y mi presa.
Entonces viene de golpe
toda la desilusion:
"Me he casado con Martirio
y no con Consolación".
Antes la historia acababa
Pepe conocia su suerte.
"Esto solo durará
hasta que llegue mi muerte".
Pero algo ha cambiado ahora
para esas niñas tan finas
es que ya existe el divorcio
que las deja en una esquina.
por Encarna López del grupo ALAS (www. alasescritorasyarte.com)
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