13 agosto 2018

UN CADAVER BAJO LA PLAZA



Pequeñas y poco conocidas historias de Málaga

UN CADAVER BAJO LA PLAZA.

La plaza de San Pedro Alcántara es una de las plazas recoletas (y algo abandonada) del centro histórico de Málaga se encuentra entre la calle Carretería, la Plaza del Teatro, Tejón y Rodríguez, y calle Álamos; está abierta a la primera, y en ella destacan un gran ficus y un busto dedicado a un afamado cantante de rock local: Rockberto, que fuera vocalista del grupo Tabletón.

Pero no va esta “pequeña y poco conocida historia de Málaga” del arte musical, sino de arquitectura. El espacio que abarca la plaza estuvo anteriormente ocupado por el Convento de San Pedro Alcántara, que se instaló en el lugar en 1682 ( por Real Célula de Carlos II y permiso papal), y permaneció allí hasta mediados del siglo XIX (1835) después de la desamortización de Mendizábal. 

Poco después, el convento y su iglesia fueron demolidos instalándose allí la plaza que ahora conocemos.
Bajo la plaza quedaron sepultados los restos de uno de los arquitectos barrocos que más y mejor trabajo desarrollaron en Málaga y la provincia (especialmente Ronda): José Martin de Aldehuela.

Su extensa labor la desarrolló hasta una edad muy avanzada, pero a pesar de tanto trabajo murió pobre; nunca cobró por su trabajo en el Puente Nuevo de Ronda a pesar de gastar en la licitación de la obra.
La tradición popular dice que revisando las obras del puente de Ronda, una ráfaga de viento hizo volar su chistera y al intentar cogerla se precipitó al tajo falleciendo en el acto.

La realidad es que murió en Málaga el 7 de Septiembre de 1802. Al entierro solo acudió su único hijo vivo. Fue enterrado en la desaparecida iglesia del convento de San Pedro de Alcántara. Hoy, en un edificio del lateral de la plaza que ocupa el solar de la iglesia, existe una placa recordando que en el subsuelo se encuentran los restos del maestro.


Buscar